Que mierda de vida

Ella era la reina del baile, con sabor a tequila,
Se dejaba querer por cualquiera, incluyéndome a mí,
Me toreaba con dulces milongas, martillando mi vida,
Me dijo que su amor era mío y yo la creí…

Y en su vida no fui más que un sueño, el hombre invisible,
Que detrás de su sombra aleteaba tras un imposible,
Que mierda de vida, chaval, que triste la derrota,
Y en la mesa de póker de Dios, aposté por su boca….

Y hoy las faldas que ayer prometían soeces debates,
Y me saben a triste consuelo, esta piel no es mi piel,
Y ligando mi negro futuro a un cruel disparate,
Te juro que, a pesar de todo, también se querer..

Ella era un enigma escondido, que quise descifrar,
Intentaba ganar la partida y el tiempo pasó,
Y un día cualquiera el proyecto se echó a volar,
Dejando una estaca ardiendo en mi corazón…

Y en su vida no fui más que un nombre sin pena ni gloria,
Que a pesar de amarla más que nadie, el viento me borró,
Cuando un tango resumió el silencio de su larga sombra,
El cenicero rebosaba caladas de amor….

Y hoy las bocas de fin de semana no llenan el hueco,
Que esta diosa del olimpo de kodak dejó en mi corazón,
Cuando el color de sus ojos me mostró un mundo perfecto,
La tierra se trago el consuelo de aquel tibio calor…

Que mierda de vida chaval, que cama mas fría,
Que vives echándole leña a la tensa agonía,
Otra vez has vuelto a perder el partido,
Pidiéndole perdón por haberla querido…