Sucede que a
veces la vida te inyecta el veneno
De miedo
ensuciando tu parcela en el cielo,
Miramos los
trozos de un amor reciclado,
Lloramos por
falta de ilusión y de encanto.
Y pasa que
pasa el amor inadvertido
Con los
brazos abiertos ofreciendo el abrigo
Y ese
tintineo que te ofrece consuelo
Limpiando y
sanando tu emoción y tu cuerpo.
Vuelve a ser
viernes, se te abre la puerta,
El cerrojo
se rompe en la ventana secreta
Tu corazón
late de vida vibrante,
Porque vuelve
lo que siempre añoraste.
Y las
mariposas emprenden el vuelo
Detrás de
los lienzos que pintamos de negro,
El color del
amor inunda tu mirada
Que nunca
dejó de estar enamorada.
El teléfono quema
y susurra tu nombre
El sabor de tu lengua iluminando la noche,
De hermosos sueños que valen la pena,
De millones de años de amor sin tregua.
Vuelve a ser viernes, el miedo se extingue
El amor destroza la pared de lo imposible,
Tu vida vuelve a ser sinfónica y limpia
Y vuelve el cariño en su justa medida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario